Desde junio de este año, Leonardo Torres es el nuevo Director General de Mérica Foods. Gran profesional del marketing de origen colombiano, cuenta con una larga experiencia tanto en la innovación y transformación de negocio, como en el campo agroindustrial.
En lo personal, se define como una persona “simple, práctica y muy familiar”.
Con una clara visión orientada a resultados, en esta entrevista nos habla sobre sus propios retos profesionales, pero en especial sobre el futuro del Grupo Mérica, su posicionamiento en el mercado, sostenibilidad y cultura de empresa.
¿Por qué apuestas por Mérica Foods?
Acepté la oferta de Mérica Foods porque representa lo mejor de América Latina en Europa. Además, es una empresa que ha consolidado sus inversiones y quiere dar un paso adelante en digitalización y nuevos modelos de negocio. Es y tiene una buena base para seguir creciendo.
En segundo lugar, dije sí a Mérica porque creo en los productos de origen y en el valor agregado. Nosotros vendemos alimentos que tienen un vínculo emocional con los latinos que viven aquí y al mismo tiempo aportamos salud y nutrición al público español.
¿Qué retos profesionales enfrentas en esta nueva etapa?
En primer lugar, mi objetivo personal es profundizar en los conocimientos de la cultura española. Antes de llegar a Mérica Foods ya había negociado con proveedores y distribuidores españoles pero no había vivido nunca en el país. El primer objetivo profesional es incrementar la facturación de Mérica Foods multiplicándola 4 veces para 2027.
¿Qué es lo que más te gusta de la cultura española?
Una de las cosas que más me impacta son los vínculos históricos de España con la inmigración y el contacto con otras culturas. En España este enlace está aún más arraigado que en otros países. Muchas culturas hacen parte de su historia. Esta variedad se refleja en la música, la escritura, la poesía, la forma de comunicar, así como a nivel gastronómico.
Para la nueva etapa en Mérica Foods, ¿qué relevancia tendrán temas como la sostenibilidad y la ecología?
Nuestro objetivo es acercar el campo a la mesa. Todos los productos de Mérica Foods aportan valores nutricionales importantes y son fundamentales para mantener una dieta sana. En los países de origen de nuestros productos se cultiva maíz, trigo, arroz, patatas y otros alimentos con valor agregado sin que sean ultraprocesados. Es un tema de seguridad alimentaria.
¿Cuál es el público objetivo de Mérica Foods?
Mérica Foods se dirige tanto a latinoamericanos a los españoles. Bebidas, chifles de plátano, salsas naturales, quinoa y frijoles, por ejemplo, ya han sido “adoptados” por el público español. Y tenemos la marca Tesoro Natural enfocados a la alimentación saludable.
Además, el auge de la cocina fusión, tanto en los restaurantes como dentro de los hogares, representa una extraordinaria oportunidad de crecimiento. Por ejemplo, Mérica Foods tiene una salsa de soja peruana que hoy en día no se utiliza sólo para reproducir las recetas del país andino, sino también en los restaurantes nipo-peruanos.
Como decía, España es un país caracterizado por una gran mezcla de cultura y por lo tanto nuestro público objetivo crece y cada vez tiene más puntos de consumo a los que debemos llegar.
¿Hay alguna línea estratégica en el horizonte?
De momento no puedo anticipar nada por confidencialidad. En línea general, queremos integrarnos verticalmente para garantizar la llegada de los productos. Otro reto es la capacidad de almacenamiento. En las épocas de crisis tenemos que ser capaces de seguir abasteciendo a nuestros clientes.
Este último tema está ligado a la seguridad alimentaria. No se trata de proveer solamente la capacidad nutricional requerida, sino también la cantidad de alimentos necesarios. Para tener las espaldas cubiertas hay que establecer unas alianzas estratégicas. Los acontecimientos geopolíticos o de pandemia son dos ejemplos perfectos de la importancia del abastecimiento.
Como especialista en marketing, ¿cuál crees que ha sido la clave de la estrategia para acercar los productos latinos a Europa?
La clave del éxito de Mérica Food fue el lanzamiento de la mayor cantidad de productos que no se conseguían antes en España. Fueron los pioneros.
¿Qué es lo que diferencia Mérica Foods de la competencia?
Mérica Foods tiene una relación excelente con los minoristas. Conocen nuestra empresa, quieren los productos y están dispuestos a darle prioridad frente a la competencia. Esta confianza es fundamental a la hora de lanzar nuevos productos. A esto hay que añadir, por supuesto, la confianza de los consumidores que compran nuestra gama desde hace 20 años. Es más, algunas marcas distribuidas por Mérica Food son auténticas instituciones en América Latina.
Finalmente, la toma de decisiones y la solvencia son otros aspectos relevantes. Tenemos una gran capacidad de compra y almacenamiento y somos capaces de tomar decisiones rápidas: cambiar el packaging, renovar la imagen, hacer patrocinios, lanzar promociones, innovar, etc.
Como buen colombiano, ¿por qué consideras que tu país es relevante en la gastronomía de latinoamérica? ¿Cómo proyectas su influencia en Europa?
Muchos de nuestros productos, aunque son cultivados en España, no cubren toda la demanda. Nos destacamos por la producción agroindustrial, por ejemplo de panela, arroz, aguacate, frijoles y frutas como banano, piña o mango (tanto fresca como en concentrados para zumo).
De la línea de productos que ofrece la marca, ¿puedes indicarnos tu favorita?
Mis productos favoritos son los jugos con chía y el agua de coco. Tengo experiencia laboral en el campo de las bebidas y sé que la calidad de estos artículos es muy buena. El agua de coco, por ejemplo, no se realiza a partir de concentrados y eso marca la diferencia.
También me gustan las marcas colombianas que me permiten mantener mis orígenes, como por ejemplo las arepas, muy típicas en Medellín. Claramente es muy bueno consumir estos productos en ocasiones especiales. Gracias a la gama de Mérica Foods, organizar una cena entre amigos es muy sencillo. Y al final, siempre puedes rematar la noche con una buena copita de ron como por ejemplo, nuestro Ron Viejo de Caldas.